El trofozoíto de E. histolytica se encuentra en la luz del colon o invadiendo la pared intestinal, donde se reproduce por simple división binaria.
En la luz del intestino los trofozoítos eliminan las vacuolas alimenticias y demás inclusiones intracitoplasmáticas, se inmobilizan y forman prequistes; éstos adquieren una cubierta y dan origen a quistes inmaduros con un núcleo, los cuales continúan su desarrollo hasta los típicos quistes tetranucleados.
La formación de quistes sucede exclusivamente en la luz del colon y nunca en el medio ambiente o en los tejidos.
Unicamente del 10 al 25% de las personas que presentan E. histolytica en el colon son sintomáticas. El resto se consideran portadoras sanas.
Invasión a la mucosa. El contacto físico de los trofozoítos con las células de la mucosa del colon es seguido por la acción de una proteína de adherencia o lectina, con gran afinidad por la galactosa, la cual es abundante en las células del colon.
La penetración a la mucosa es favorecida por enzimas líticas que producen lesiones en la superficie de las células. Paralelamente con esto, los neutrófilos que se han acumulado en los puntos de penetración son destruidos por la actividad de la lectina del parásito y al romperse liberan enzimas que contribuyen a la lisis celular.
La distribución geográfica de la amibiasis intestinal es amplia: puede considerarse una parasitosis cosmopolita, pues se encuentran casos en todo el mundo, pero con prevalencias muy variables.
Se ha considerado que la prevalencia mundial es de 500 millones de personas infectadas, de las cuales sólo el 10% corresponden a E.histolytica y el 90% a E. dispar.
Estudios hechos en Colombia en 1969 demostraron que un poco más de la mitad de la población estaba parasitada por una o varias amibas intestinales, lo cual indica un alto índice de contaminación fecal.
La prevalencia de E.histolytica fue de 23.7% en todas las edades, sin diferencias en relación con sexo o con residencia en ciudades o en zonas rurales. La prevalencia en lactantes fue de 4.8%, cifra muy alta para este grupo.
Entre las amibas no patógenas se encontraron prevalencias así: Entamoeba coli 39.2%, Endolimáx nana 34.1%. lodamoeba butschlii 7.7%.
La contaminación con quistes de amiba es relativamente fácil en las zonas endémicas, donde la eliminación de las excretas humanas no es adecuada o presenta deficiencias notorias.
Este factor es especialmente importante en las zonas rurales y en los barrios pobres de las ciudades donde no existen sanitarios o letrinas higiénicas. Las materias fecales eliminadas en las huertas o en el campo, contaminan la tierra y pueden llegar al agua que se usa para la bebida.
Las hortalizas ocasionalmente son regadas con aguas contaminadas o se ponen en contacto con la tierra infectante. Si no son lavadas minuciosamente y de manera apropiada, constituyen una causa frecuente de contaminación amibiana.
Se han presentado epidemias de amibiasis por contaminación de acueductos con aguas negras.
Todas las drogas antiamibianas actúan contra los trofozoítos de E. histolytica y son incapaces de penetrar la pared de los quistes. En los casos de amibiasis intestinal, en los cuales existen quistes, la desaparición de éstos después de un tratamiento, se debe al ataque de las drogas sobre las formas trofozoíticas que los originan y no por acción directa contra ellos.
Todos los casos de amibiasis se deben tratar, incluyendo los asintomáticos.
En este último grupo hay dos razones que lo justifican: eliminar los parásitos de la luz intestinal para cortar la cadena de transmisión y, evitar que en algún momento tengan amibiasis invasiva, en caso de ser E.histolytica y no E. dispar.
La pauta a seguir en todo tratamiento debe basarse en la localización de los trofozoítos.
Estos pueden estar en la luz del intestino, en la pared del colon o en los tejidos extraintestinales.
Según lo anterior, se debe seleccionar la droga y su vía de administración. Las drogas antiamibianas se dividen en 3 grupos de acuerdo a su mecanismo de acción.
HUMATIN Cáps. 250 mg
Alertas por composición:
Lactancia
Paromomicina
Compatible
Compatible.
Absorción sistémica mínima.
Embarazo
Paromomicina
En estudios animales ha producido daño fetal y no hay estudios adecuados en mujeres embarazas. O bien, no se han realizado estudios en animales ni en humanos. Sólo debe administrarse en el embarazo si el beneficio justifica el riesgo potencial.
ATC: Paromomicina
PA: Paromomicina sulfato
Envases: Env. con 8
Dispensación sujeta a prescripción médica
Fi: Medicamento incluido en la financiación del SNS
Facturable SNS: SI
Comercializado: Si
Situación: Alta
Código Nacional: 700701
EAN13: 8470007007012
Precio de Venta del Laboratorio: 4.0€
Precio de Venta al Público IVA: 6.24€
Precio Facturación: 6.24€
Principio Activo
Paromomicina sulfato 250 mg/1 cápsula
Clasif. Terapéutica de HUMATIN
Disentería. Intestinal, amebiasis. Teniasis (taenia saginata y taenia solium)
Fecha alta: 01/10/1961
lactancia: compatible
Tracto alimentario y metabolismo > Antidiarreicos, antiinfecciosos y antiinflamatorios intestinales > Antiinfecciosos intestinales > Antibióticos
Mecanismo de acción
Paromomicina
Antibiótico activo frente a protozoos, cestodos y bacterias.
Indicaciones terapéuticas y Posología
Paromomicina
Oral.
Contraindicaciones
Paromomicina
Hipersensibilidad.
Advertencias y precauciones
Paromomicina
I.R. Obstrucción intestinal o erosión intestinal (aumenta absorción).
Insuficiencia renal
Paromomicina
Precaución. Reducir dosis.
Interacciones
Paromomicina
Disminuye absorción de: metotrexato.
Aumenta su toxicidad con: aminoglucósidos, anestésicos generales, vancomicina, capreomicina, polimixinas, cefaloridina, cefalotina, bloqueantes neuromusculares, cisplatino, mercaptomerina, furosemida o ác. etacrínico.
Embarazo
Paromomicina
Valorar riesgo/beneficio.
Lactancia
Paromomicina
Compatible. Absorción sistémica mínima.
Reacciones adversas
Paromomicina
Náuseas, vómitos, calambres abdominales, diarrea.
A dosis elevadas: síndrome de malabsorción con esteatorrea.
Fuente:
El contenido de esta monografía de principio activo según la clasificación ATC, ha sido redactado teniendo en cuenta la información clínica de todos los medicamentos autorizados y comercializados en España clasificados en dicho código ATC. Para conocer con detalle la información autorizada por la AEMPS para cada medicamento, deberá consultar la correspondiente Ficha Técnica autorizada por la AEMPS.
Monografías Principio Activo: 11/05/2016